Me he tomado mi cervecita y ¡vaya si se ve todo mucho más rosa!
Lindo día. Suave brisa, gente alegre por doquier, decenas de familias reunidas en un entorno natural y atractivo.
Mañana soleada. Los rayos acarician mi piel apenas protegida. El efecto del alcohol ya fluye por mis venas y el calor del astro rey me sabe bueno.
Sentada sobre el césped, escucho las voces de todas esas personas disfrutando a mi alrededor. Me siento bien.
Yo también.
Ann